¿Sabes que puedes estar pagando un 20% más de calefacción?

Has pasado un día duro en el trabajo, has practicado algo de deporte, has hecho la compra y has recogido a los peques del colegio… ¡Estás deseando llegar a tu casa, abrir la puerta y sentir el calor de tu hogar! Pero, ¡cuidado! Este agradable calor puede salirnos más caro de lo que debería.

Según comunicó recientemente la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) calentar la casa con gas durante este invierno sería un 15% más caro que el año anterior. Si a este porcentaje le sumamos las viviendas que no disfrutan del grado de humedad adecuado, podemos gastar incluso un 20% más de calefacción, dejando de ser atractivo entrar en nuestro hogar y disfrutar de un espacio acogedor.

Un buen aislamiento térmico evita las pérdidas continuas de calor y frío, pero también hermetiza en exceso los hogares. No obstante, si nuestra casa tiene problemas de humedad, el aire caliente se condensará con mayor facilidad y empezaremos a:

  1. Observar inconvenientes estéticos y estructurales (moho).
  2. Experimentar graves problemas de salud (respiratorios, dermatológicos, articulares)
  3. Incrementar nuestra factura en calefacción considerablemente.

La temperatura ideal en nuestra casa en la estación de invierno debe oscilar entre los 19°C y 23°C y como hemos comentado en artículos anteriores, los niveles de humedad en invierno deben estar entre el 40% y el 60%.

Muchos de nuestros clientes nos llaman angustiados porque están viendo cómo la humedad genera manchas en las paredes, pintura desconchada, olores desagradables, hongos, rodapiés despegados, pero, aunque esos problemas son los más visibles, no son los más graves.

El exceso de humedad en tu hogar baja la calidad del aire que respiras y fomenta la aparición de hongos y bacterias microscópicas que inhalas inconscientemente. Si subimos más la temperatura y provocamos un incremento del nivel de humedad relativa, nuestro cuerpo tendrá problemas para refrigerarse, experimentando sudores ante el mínimo esfuerzo que hagamos.

Otra complicación, que no es visible en el día a día, sucede cuando le preguntamos a un cliente si ha notado un incremento en la factura de la calefacción, y muchos de ellos afirman estar pagando más desde que empezaron los problemas de humedad.

¿Por qué los problemas de humedades aumentan la factura?

La respuesta es sencilla. Las personas que viven en una casa con alto grado de humedad, perciben el ambiente frío, y los lleva automáticamente a subir la calefacción a temperaturas elevadas, que no son en absoluto las recomendadas para la salud, y por supuesto, encarecen la factura. Cada grado que aumentemos en la calefacción, hará que también agrande el gasto en un 7 % u 8 %.

Los problemas de humedades en invierno más frecuentes los encontramos en los puntos más fríos de una estancia, como pueden ser ventanas (rocío de cristales), esquinas de techo con pared, vigas, armarios empotrados, zonas sombrías, etc. Es la denominada humedad por condensación, provocada por el cambio brusco de temperatura interior y exterior de la casa (puente térmico). Mantener un aire limpio (no viciado), es primordial. La ventilación natural es la que mejor consigue este objetivo.

 

En Humetek somos expertos en problemas de humedades en cualquier estructura y nuestro equipo de expertos puede ayudarte a que no sufras ninguno de ellos. Contacta con nosotros si tienes cualquier consulta, estaremos encantados de atenderte, realizando una evaluación de tu problema de manera gratuita.

 

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