“El cuartel de artillería de Vicálvaro durante el periodo de la Guerra Civil, hoy en día Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, presentaba un problema importante de humedades. Se trataba de un exceso de humedad por capilaridad que estaba afectando a la fachada del edificio. En concreto al rectorado de la Universidad. Se trata de un espacio donde a diario pasan cientos de personas para realizar gestiones administrativas. Ante esta situación se pusieron en contacto con Humetek para que se acabara con las humedades. En unas semanas los trabajadores del rectorado vieron como la humedad había desaparecido de la estructura del edificio. En poco tiempo pudieron retomar con total normalidad su actividad profesional. Dar una buena imagen de las instalaciones a alumnos y personal es importante para dotar de prestigio a una institución pública como es la Universidad”.
Respuesta de Humetek:
Con una ejecución en tres fases, Humetek se hizo cargo de la rehabilitación en el rectorado de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid como consecuencia de las humedades. Se trataba de un caso de humedades freáticas. Esto quiere decir que la capilaridad deterioraba la fachada. La humedad de sus muros de carga meteorizaron el ladrillo, y los restos de eflorescencias de salitre provocaron daños en la fachada. En concreto en las planchas de granito que recubrían todo el perímetro de la fachada.
El primer paso que dimos fue retirar estos zócalos de granito. Después se aplicó el tratamiento químico mediante resinas en base silioxanos. Se aplicó con inyecciones en la parte baja consiguió la total estanqueidad de la fachada.
Una reforma que tuvo lugar en 2008 y que casi una década después se mantiene en perfecto estado. La calidad de los materiales inyectados y su buena aplicación hacen que perdure con el paso de los años. A pesar de las inclemencias del tiempo, el estado de la fachada sea impecable. Sin duda una instalación como el rectorado de una Universidad pública tiene que contar con un mantenimiento excelente. A la mínima señal de humedades el afectado debe de ponerle solución. El tiempo no es un buen compañero para este tipo de patologías. Por ese motivo se recomienda atacar cuanto antes el problema para que el deterioro no vaya a más.